lunes, 17 de febrero de 2014

Tú eres tu proyecto. El perfil psicológico del emprendedor.

La semana pasada llegó una de las primeras crisis de mi proyecto, empezaron a suceder problemas consecutivamente sin darme respiro a asumirlos, llegué a temer por la idea, su concepto y por todo. Lo he comentado con otros amigos y amigas que en esta locura colectiva han decidido unirse a la aventura de emprender y lo ven algo normal y habitual, "Parte del proceso" han dicho.

Quizás sea así, pero vaya, si que es difícil esto de emprender, ya no sólo por los papeleos, por la situación económica o ese tipo de cosas, difícil psicológicamente  ¿Sabéis por qué? Porque tu idea, tu proyecto, eres tú. Si tú estas bien, con animo, con fuerzas, ganas e ilusión, las cosas funcionan y te enfrentas a los problemas con buena actitud. Sin embargo, si tu estás mal preocuparte bien por buscar solución a tus problemas porque afectará a todo, y en el todo estará tu proyecto.

UN PSICÓLOGO PARA EMPRENDEDORES POR FAVOR


Para ser emprendedor hay que tener actitud, ganas, pero sobre todo fuera, mucha fuerza para aguantar los problemas y superarlos, no venirse abajo a la primera de cambio. Creo que en general podrían hacer un perfil psicológico del emprendedor que nos englobe a todos con unos mismos conceptos. Investigando un poco he encontrado ESTA web que me ha parecido muy interesante con información útil sobre este mismo tema, la psicología de emprender. Os recomiendo que le echéis un vistazo, trata temas como "Superar la carga emocional de emprender" "Inteligencia emocional" "Cómo superar una crisis" ...





En esta ocasión mi solución ha sido sentarme detenidamente, sin ordenador, delante de un taco de folios en blanco con un bolígrafo en la mano y comenzar a escribir: Analizar objetivamente la situación sobre qué es mi proyecto, cuál son sus problemas, cuál sus fortalezas, cómo puedo mejorarlo... hasta que finalmente me levanté con una nueva idea renovadora que me dio fuerzas para seguir adelante.  

Cada uno tendrá que buscar una vía de escape para canalizar sus inquietudes y problemas emprendedores.

Y para concluir... invocaré una frase motivadora, de esas que tanto critico, para rematar este post y mandar un buen mensaje positivo.


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